
TAROT DEL PÁRAMO


La construcción de edificios a gran escala desde las primeras civilizaciones, se debió a ideales arquitectónicos y espirituales; el caso de los zigurats en la antigua Mesopotamia, “encierra la idea de que el hombre no debería vivir en lugares elevados, puesto que éstos representan terrenos numinosos predestinados para el culto” (National Geographic, 2012). Otro es el caso de las catedrales góticas, que nacieron por la necesidad de crear templos tan majestuosos “que transmitieran la grandiosidad y la gloria de Dios y que sirvieran a los fieles como reflejo de la vida eterna” (Cisa, La Vanguardia, 2020). Además de entablar una conexión entre el cielo y la tierra, muchas de las grandes construcciones del pasado obedecían a los intereses políticos, religiosos, militares y de poder de una civilización, eran el símbolo del Estado.
De la misma forma, La Torre del tarot simboliza un conjunto de ideales orientados a la dimensión espiritual, o al inconsciente. Alejandro Jodorowsky (2004) hace una importante observación al respecto cuando se refiere al título original en francés del arcano XVI; La Maison Dieu, que traducida al español se entendería como “La casa Dios” y no “La casa de Dios”, que lo llevó a concluir que La Torre es una forma de simbolizar al cuerpo humano como el hábitat de la divinidad; por su parte, Sallie Nichols (1989) se refiere al término “encastillar” como una forma de expresar la idea del “ego monumental”, y de hecho la Real Academia Española define la misma palabra como una actitud humana determinada a “perseverar con tesón, y a veces con obstinación, en su parecer y dictamen, sin atender a razones en contrario”.
Según Nichols, para entender esto desde el punto de vista psicológico, se puede decir que los seres humanos pueden llegar a ser prisioneros de sus propias "torres ideológicas", es decir, "cualquier construcción mental, sea política, filosófica, ideológica o psicológica [...] a fuerza de palabras e ideas". Por lo tanto, cuando alguien se da cuenta de que todo lo que ha venido creyendo fervorosamente durante su vida va por la dirección equivocada, se produce una suerte de cataclismo mental, generado por el impacto del trueno de la consciencia.
A pesar del dolor emocional que un suceso como este significa, la liberación forzosa de ideales y conductas dañinas permite que un individuo avance a paso firme en su camino hacia la autosuperación. Claro está, esta toma de consciencia abrupta, al ser difícil de digerir, toma su tiempo, por lo que es necesario volver a remitirse al arcano de La Templanza, cuya cualidad de auto sanación permite asimilar este acontecimiento de una manera creativa.